de asociación» entre Europa y el Oeste de África
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de asociación» entre Europa y el Oeste de África
Llamada a las organizaciones de la sociedad civil y miembros electos, en Europa y África Iniciado por Jacques Berthelot, Jean Gadrey, Susan George Y Majdouline Sbaï El Parlamento europeo no debe ratificar el acuerdo «de asociación» entre Europa y el Oeste de África El 10 de Julio de 2014, en Accra, capital de Ghana, los 16 jefes de Estado del Oeste de África han firmado un proyecto de Acuerdo de Asociación Económica (AAE) entre la Unión Europea (UE) y los 15 Estados de la CEDEAO (Comunidad económica de los Estados del Oeste de África) más Mauritania. De hecho, se trata de un acuerdo de «libre-intercambio» cuyo objetivo es suprimir el 75% de los derechos de aduana sobre las importaciones procedentes de la UE y de limitar su política comercial más allá de las exigencias de la OMC1. Si el Parlamento europeo ratifica este acuerdo, será un desastre para los pueblos de África pero también para los de Europa. Sería el resultado de las presiones ejercidas por las grandes multinacionales europeas, a cuyo servicio, se ha puesto la Comisión Europea, consiguiendo arrastrar a Jefes de Estado africanos que han permanecido insensibles a los repetidos avisos de su sociedad civil, movilizada desde hace ya 14 años. Los pueblos europeos no tienen nada que ganar, sino más bien todo lo contrario. Este acuerdo va a favorecer una agricultura más productivista, contaminante, destructora de empleos, así como determinados sectores industriales igualmente productivistas, exportadores de bienes de calidad mediocre, en detrimento de las políticas de agricultura sostenible, de soberanía alimentaria y de transición industrial ecológica. Va a alentar la importación por parte de la UE de materias primas brutas antes que pensar y potenciar estrategias de reducción de los balances de materia de la producción europea. Los pueblos del Oeste de África, y más allá, todos aquellos otros países del África subsahariana y de las 14 pequeñas islas del Pacífico, bajo la amenaza de similares acuerdos, tienen todo que perder. 6 Estados de África Austral ya han rubricado los “AAE SADC” (es decir de la Comunidad de Desarrollo de África Austral) el 22 de julio. Los 12 de los 16 estados del Oeste de África que tienen el estatus de PMA (países menos avanzados) ya no podrán tasar los 10,6 mil millones de euros sobre los productos que importan de la UE, de ahí una pérdida considerable de recursos presupuestarios. Lo que promete pagar la UE en contrapartida es un espejismo: Solo tenemos las cantidades habituales del Fondo europeo de desarrollo – 4 euros por habitante y año! –, que es una financiación de los Estados miembros fuera de presupuesto comunitario, más el «reciclaje» marginal de otros fondos comunitarios ya programados. Es soltar la presa por la sombra. Pero sobre todo, para los países implicados, es el conjunto de su agricultura tradicional y de autoconsumo, su seguridad alimentaria y todos los proyectos actuales de transformación in situ y de desarrollo de la industria regional, quienes se verán golpeados de lleno por una competencia europea desleal, destructora de empleos y por una dependencia creciente del vaivén de los mercados mundiales. Es el pillaje programado de los recursos naturales, del suelo y del subsuelo. El desarrollo endógeno de la región y los proyectos de integración regional se sacrificarán en beneficio de una economía enfocada a la exportación y fuertemente centrada en el carbón, con poblaciones comercialmente reducidas a la importación de productos subvencionados y de dudosa calidad al tiempo que hacen competencia a su propia producción. Una de las consecuencias previsibles será la migración masiva de poblaciones, privadas de futuro en su país, en una situación dónde la población del Oeste de África debería pasar de los 302 millones de habitantes en 2010 a 510 millones en 2030 —tanto como en la UE de hoy como en la de 2030— y 807 millones en 2050, y en un contexto de calentamiento climático particularmente acentúado en esta región. Nosotros, ciudadanos, ciudadanas, organizaciones de la sociedad civil en Europa y en África, solicitamos a los miembros electos europeos y en particular a los del Parlamente europeo: ⁃ RECHAZAR la ratificación de este acuerdo humana y económicamente escandaloso; ⁃ No sacrificar los pueblos sobre el altar del beneficio de un puñado de multinacionales depredadoras. ⁃ Exigir estudios de impacto independientes. ⁃ Comprometerse a favor de Acuerdos de Cooperación y de Solidaridad (ACS) que no se basen, como es el caso de los AAE en el «libre-comercio» que amenaza las libertades y la emancipación humanas. Firmantes (organizaciones de la sociedad civil, ciudadanos, personalidades). Con el apoyo de (miembros electos)…